Esclava Encadenada
Sumisa Secuestrada y Vendida al Amo Millonario
Las cadenas abrazaban a Elena.
Sus muñecas. Sus tobillos. Su cuello.
Iba a ser vendida. Como un objeto.
Voluntariamente. Para siempre.
Pero el sacrificio valía la pena.
Su padre tenía deudas. Su madre cáncer.
Aquello solucionaría la vida de ambos.
Tenía miedo. Y entonces lo vio.
Zapatos pulidos de un negro billante.
Traje a medida de empresario.
Espalda ancha. Hombros fuertes.
Un rostro bello como Dios.
Unos labios que la derritieron.
Y una mirada que la hizo agachar la cabeza.
Elena:
Marcos lo es todo para mí.
Es mi hombre. Mi señor.
Mi amo. Mi dueño.
Y yo soy suya. Le pertenezco.
En cuerpo. En mente. En alma.
Y mis cadenas son prueba de ello.
Pero, ¿y si Marcos es mucho más?
Marcos:
No soy un buen tío.
Pero nunca había hecho algo así.
Era mi 37 cumpleaños.
Era un gigante. En todos los sentidos.
Alto. Fuerte. Musculado. Dotado.
Multimillonario. Exitoso. Divertido.
Dueño de la noche. Bares. Clubs. Discos.
Y locales aún más privados. Sexo. BDSM.
Era fue mi primera y última compra.
Podía tener a quien quisiera.
Pero la elegí a ella.
Era perfecta.
Y era mía.
100% mía.
La Muñeca de Metal
Sumisa Obediente Enamorada del Motero
Amy no es una chica más.
Amy es huérfana. Ilegal.
Sin documentación. Inexistente.
Y es la protegida de Black.
El presidente del club.
Él la encontró. Él la protegió.
Él la educó. Él es su padre.
Ahora Amy es “La Muñeca de Metal”.
Atractiva. Tatuada. Letal.
21 años. Intocable. Virgen.
Y nadie, nadie, puede tocarla.
Aunque es muy difícil resistir…
Marcus lo intentó hace 5 años.
A la fuerza. Fracasó. Le costó la vida.
Jake, el vicepresidente, se hizo cargo.
5 años a la sombra, encerrado.
Y 5 años con Amy visitándole.
Hoy Jake sale de la cárcel.
Hoy Amy cumple 21 años.
Hoy Amy puede elegir ser tocada.
Y Amy sabe muy bien lo que quiere.
Quiere a Jake. Su salvador. Su héroe.
El nuevo presidente del club. Su amo.
Él salvó su virginidad.
Y ahora él la tomará.
Él la hizo sentirse una mujer.
Y ahora la hará sentirse su sumisa.
Z*rra Insaciable
Sumisión Doble para la Esclava de Dos Amos
Esa princesita no sabe lo que le espera.
Pero cree saber lo que quiere.
A nosotros, los 2 reyes de la noche.
Y si nos quiere, nos tendrá.
Hemos planeado esto durante meses.
Y lleva provocándonos desde entonces.
Desde que entró en nuestro territorio.
La nueva camarera de nuestro mejor club.
Piernas que quitaban el sentido.
Labios de azúcar. Ojos de tigresa.
Sonrisa de súcubo. Cabello de ninfa.
Divertida. Lista. Seductora. Fatal.
Es difícil impresionarnos a mí y mi hermano.
Llevamos casi una década en este negocio.
Codo con codo hemos levantado nuestro.
Y ahora somos los reyes de la noche.
37 años, gemelos, atractivos y ricos.
Con razón Natalia nos desea.
Y si es lo que quiere, lo tendrá.
Ángel y Dante siempre saldan sus cuentas.
Esa z*rra insaciable va a saber lo que es bueno.
A nuestros pies. Con nuestro collar.
Nuestra pequeña esclava sexual.
Primero conocí a Ángel.
Luego vino Dante.
Y ahora debo enfrentarme a ambos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario